viernes, 27 de abril de 2012


Nos comprometimos suponiendo que en el amor hay que ser “eficientes” y “desempeñarse” como en el trabajo. Descubrimos que en la relación de novios verdaderos, el valor máximo es la “gratuidad” y que cuando se sabe perder se gana, porque el amor es una rendición que conquista.
Somos ingenieros comerciales; nuestros amigos aprobaban nuestro enlace, creíamos que todo iba a salir de perillas.., pero empezaron los problemas. La empecé a notar triste, con ojos llorosos.
“Yo la amo, la quiero, a pesar de que ella no me infla y me dice que está defraudada de mí Yo le di gusto en todo: Si le faltaba algo, yo corría; si deseaba viajar, yo la complacía; necesitaba una nana, yo se la buscaba; si se enfermaban los niños, yo me quedaba en la clínica para que ella descansara en la noche. Cerebralmente yo me felicitaba, porque a ella no le faltaba nada, igual mente a nuestros hijitos.
Ahora me di cuenta que no basta estudiar en la “U”. Ya que la Universidad no lo enseña todo, menos los colegios. Me doy cuenta que lo hago todo al revés. Ella se fue a dormir con los niños. Me rechazaba.

NUNCA TOMÉ EN CUENTA SUSENTIMIENTOPROFUNDOS.
 Ella muchas veces al lado mío lloraba y lloraba, y yo estúpidamente le preguntaba ¿pero qué te pasa? ¿Por qué lloras? (Preguntas cerebrales). Y al no tener respuesta concluía “es un problema de mujeres”, “emociones sin explicaciones lógicas” y no me preocupaba más, Ahora me doy cuenta de que “yo creía que tenía la razón”. Pero estaba equivocado, porque mi actitud era cerebral y no con amor. NO EMPATISABA CON ELLA. Y eso que yo soy Ingeniero comercial, especialista en comercio exterior, “y era el mejor en estos negocios y apliqué el mismo sistema a mi matrimonio. Ustedes pueden percibir mi gran error Nunca más,
¿Se puede tomar la familia como un simple micro- empresa? Para que resulte esta hermosa y fecunda aventura matrimonial es indispensable que se tomen muy en serio las reglas fundamentales, que deben ser conocidas y observadas, de lo contrario todo es una farsa. En las empresas se trabaja con pensamientos, ideas, debates, discusiones. En cambio aquí, en la familia, el gran motor es el SER profundo, “el corazón de donde brotan los sentimientos”, perfume del amor.
 La intuición, la sabiduría, dones, la capacidad de pedir perdón, que no tiene nada que ver con la “Ingeniería”.
En mi trabajo, profesión, negocios, yo sé que debo “rendir”, “ser eficiente”, responder a requisitos medibles. Si no sirvo me despiden. La empresa no es una asistencia pública, no me van a tener consideración porque soy yo, sino por ser “eficiente”. “Cumplo con lo que me piden”; El acento está en mi eficiencia.
Descuidar la eficiencia razonable en el HOGAR, MATRIMONIO, el acento está en la “gratitud”. “PORQUE TE QUIERO”, porque te amo y el verdadero amor es “desinteresado” Ninguna madre ama a su pequeño “porque tiene una gran esperanza que sea un gran ministro, un gran hombre y le dé un gran prestigio a ella en el futuro; lo quiere porque es carne de su carne, es su hijo de sus entrañas, lo ama gratuitamente Lo ama y el amor lo explica todo.
Te quiero simplemente por eres tú. ¿Cómo “hacer” sentir la gratuidad en el amor?; pues con algún gesto gratuito; porque sí, porque yo quiero expresar mi amor sin ningún otro motivo que “te quiero a ti por ser tú”, “por ser lo que era para mí”. Es una acción de gracias por sentirme amado y valorizado por la otra, reconociendo que es bondad, del otro “maravilla incomprensible de la persona amada”, que me sorprende con este “regalo” inmerecidamente; pero hay algo más, a mí me pasa que siento una pulsión maravillosa de entregar ese amor espiritual fuerte, que es puro. “Cuando un niñito, un joven, una viejita, vienen corriendo y me abrazan, es puro amor”. Si se insinúa la pretensión “te toca”, “deberías”, “me lo esperaba”, “tienes que”, “es tu obliga como novia”, se pierde el encanto de la gratuidad.
Esta gratuidad aparece luminosa e inconfundible “en la declaración de amor” inicial. Ninguno de los dos “pretende”. Espera, confía, desea, pero sabe que no puede “exigir”, la respuesta, Es lanzarte con todo, en el paracaídas del amor verdadero.“Dime que me amas”, es una orden. Me siento chantajeado.
Hoy, los “LOLOS” se sienten libres de andar, tirar, pololean, se van a vivir juntos y después hacen los trámites para casarse. Muchas están curadas de es panto por las mentiras que han descubierto.
Un día cuando llegué a casa, iba con mucho susto, esperando una buena y merecida retada. Con mi esposo teníamos una comunidad de gastos. Nos comprometimos a no hacer ningún gasto sin estar de acuerdo los dos... Pero yo, a sabiendas, me comprometí en gastos y giré cheques. Era un pequeño mueble lindo para el baño,.. Pero la retada no llegó, me miró y me dijo es lindo el mueble... de hecho lo necesitábamos. Pero me habría gustado haberlo conversado y te habría acompañado.
ME SEN TI AMADA, ALIVIO AL CORAZON, sentí COMPRENSIÓN, Te sentí cerca.
Es un típico gesto gratuito, tanto más si se lo cuenta y es grato, cuanto menos esperado y “merecido”. Nadie puede merecer el amor, sólo se puede “sentir gozo, alegría”, sólo quien sabe agradecer sabe amar, porque sabe reconocer la belleza de la gratuidad. El amor verdadero no se mendiga, lo merezco. En cambio, le permito ganar la verdadera “guerra”: “el amor incondicional de su esposa”. “El amor es una rendición que conquista”. “En e! amor se gana perdiendo”, haciendo ganar a! otro ganan siempre los dos.GF.

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