sábado, 26 de mayo de 2012



SOY LIBRE EMOCINALMENTE, SÍ LO DECIDO.
DIOS ES AMOR  (1 Juan4,8)
Me parece que la libertad humana encuentra en los
Sentimientos y emociones uno de Mis mayores desafíos.
El estado interno, -configurado por ellas mis emociones,
Sentimientos   y estados de ánimo-, funciona como una fuerza poderosa que, desde dentro de mi alma, me lanza a la lucha.
Al mismo tiempo, el estado interno se parece a las constelaciones de las galaxias que dan vivacidad al universo y me llenan de esperanza.
Sin los sentimientos, mi vida resultaría pálida y descolorida, como una película en blanco y negro.
Más todavía, mi vida espiritual implica ciertos sentimientos fundamentales: amor, fe, esperanza, alegría, paz, bondad.
Estoy  frente a uno de los objetivos más importante de mi liberación personal  y de mi existencia de ser realmente persona libre. Pocos asuntos me puede resultar tan vitales como éste de aprender a manejar libremente mis emociones y sentimientos; los sentimientos  dependen, de mi decisión de aceptarlos  o anularlos. Aquí te presento varios temas relacionados con este aspecto de la liberación personal.
• LA LIBERTAD EMOCIONAL
• LA FÁBRICA DE MIS SENTIMIENTOS
• LA DESTINACIÓN EMOCIONAL
• EL GOZO DE ELEGIR LOS SENTIMIENTOS
• CAMBIO DE SENTIMIENTOS
• ANCLAJE DE SENTIMIENTOS  DE “LUZ”
• ANULAR EL ANCLAJE DE SENTIMIENTOS DE “SOMBRAS”

1. LA LIBERTAD EMOCIONAL

Es mi decisión personal para sentirme  feliz  ahora que tanto lo necesito para ser feliz.
La casi totalidad de las dependencias —respecto al alcohol, cigarrillo, comida, sexo, juego, trabajo, etcétera— son manifestaciones de la falta de mi  libertad emocional.
Tengo en cuenta que Dios nos ha creado para mantenernos en un estado mínimo de bienestar. Cuando esto me falta,
-por cansancio, estrés, problemas, desilusiones, sufrimientos y demás-, se genera en mí un estado negro. Suele ser muy frecuente en mí los sentimientos de ansiedad o angustia. Con la emociones de enojo o rabia; con la tristeza y la depresión.
Entonces, de forma espontánea, busco un medio para superar las molestias de ese estado de sombras. Al experimentar un cambio corporal con la droga, el alcohol, la comida, el juego, el sexo, etcétera, se inicia un proceso de recuperación del bienestar natural.
MI organismo total, mente-cuerpo, apoya ese proceso hacia el bienestar. No tardo, efectivamente, en sentirme bien.
De inmediato se produce, a nivel mental y neuronal, una asociación entre la superación del malestar y el objeto que hemos empleado para recuperar el bienestar. Muchas veces se trata de una conexión puramente espiritual y  mental.
No necesariamente el alcohol, o la comida, o alguna otra cosa, constituyen una causa efectiva de bienestar.
Sin embargo, no obstante la impotencia real del objeto en cuestión, el joven lo seguirá buscando para sentirse bien. Así cae en una auténtica dependencia o adicción. Cuanto más utilice  aquel objeto, tanto más profunda se volverá mi adicción.
Mí libertad emocional significa la capacidad elegir mi estado y de cambiarlo a voluntad, sin depender de nada externo.

En concreto pues, yo también soy capaz de vivir la libertad emocional. Poco a poco puedo desarrollar la habilidad de escoger y decidir cuál estado o sentimiento voy asumir.
En lugar de que una situación o persona te imponga una reacción emocional, Yo elijo la emoción con que quiero vivir. En lugar de la pasividad de quien vive en reacción, puedo desplegar la libertad de quien opto por la acción de fabricar su estado emocional.
Amor, Enojo, Alegría, Paz, Esperanza, Entusiasmo, Gratitud, Miedo Adoración.

2. LA FÁBRICA DE LOS SENTIMIENTOS
Con lo que hemos considerado, se abre paso una verdad:

La ELABORACIÓN de los sentimientos personales no se halla fuera, sino dentro de nosotros mismos.

De ordinario creo que me alegro  o me entristece a causa de las circunstancias o de las conductas ajenas. Si alguien me sonríe, me saluda y me dice palabras amables, entonces me pongo contento. Por el contrario, si me pone mala cara y me vuelve la espalda mascullando palabras agresivas, reaccionas con enojo o tristeza.
Así son las creencias de los seres humanos en este planeta. Las he encontrado en América, en África, en Europa y en Asia. La mayoría de los humanos no preciamos este regalo divino de que somos personas, y no títeres.
Pensamos que los demás y las circunstancias tienen en mano los hilos que mueven los mecanismos emocionales.
Gracias al Creador, las cosas no son así. Él nos ha hecho libres. Nos creó a su imagen y semejanza. Por lo mismo, somos personas y de ninguna manera títeres o marionetas.
La causa o la fábrica de nuestra   emociones  y sentimientos se halla dentro de nosotros mismos.
Aquí puedes observar que el estado emocional recibe el influjo causantes  de estos procesos internos
-representaciones, recuerdos y “compartir constante” interno-, sea de la fisiología o condición corporal.

Tu salud física, el funcionamiento de tus órganos, la postura y la producción química y hormonal de u cuerpo influyen en la producción de tus sentimientos.
Por otro lado, lo que ves,  sientes, huelés y gustas, así como también tus  recuerdos y tu “compartir” interno, determinan tu estado emocional.

Sin embargo, hay un factor común a una y otra fuentes de tus emociones: el conocimiento consciente o inconsciente de la realidad. Si reconoces algo como peligroso, sentirás miedo o agresividad. Si sientes algo como benéfico, sentir atracción y agra do. Si tú cuerpo, inconscientemente, percibe algo como dañoso, te despertará sentimientos de alerta y precaución. Y así sucesiva mente.
2.1 El A-B-C de la vida
Quisiera insistir en la fábrica de las emociones que encontramos en los procesos internos. Se trata de un hecho ya reconocido hace 2000 años por los filósofos estoicos. Ellos descubrieron, con absoluto acierto psicológico, que nosotros fabricarnos los;
Sentimientos  con nuestros pensamientos
En realidad, para ser más exactos, necesitamos hablar no  tanto de pensamientos, sino de interpretaciones.
Si interpretas algo como amenazante, o piensas que aquello puede acarrearte algún mal, entonces generas en tu ánimo un sentimiento de temor y defensividad.
Cuando interpretas la sonrisa de un compañero de trabajo como un gesto amable, es probable que te sientas halagado y contento. En realidad puede tratarse de una trampa. Quiere obtener de ti un asentimiento que lo favorece en sus intereses.
El papel de los pensamientos o interpretaciones en la gene- ración de las emociones queda claro al revisar el proceso de nuestro diario vivir. Adapto los pasos de dicho proceso con las primeras  letras del abecedario. Espero que así lo recuerdes con mayor facilidad.
La conclusión práctica de este proceso resulta obvia: tu forma de interpretar los hechos de la realidad –externa o interna determina la consecuencia emocional y  sentimiento.
Aquí  reaparece la  distinción :constructivo  o destructivo. Si la base interpretativa o idea con que acoges la realidad es constructiva, la consecuencia a nivel de emoción o sentimiento será igualmente constructiva. Pero ésta se volverá destructiva, si tu idea o interpretación de la realidad es destructiva.
“Sentimos según pensamos”, nos enseñaban los estoicos. Hoy decirnos que, por ser libres, tenemos la posibilidad de fabricar los sentimientos  escogiendo los propios pensamientos.
Somos libres para elegir entre una interpretación constructiva o una destructiva.
La actividad mental de Disuadirse, se refiere aquí a la posibilidad  que tenemos de cambiar una interpretación destructiva. Somos libres para cambiar nuestros pensamientos. Nadie, excepto cada uno de nosotros, piensa los propios pensamientos. Claro está, por tanto, que tenemos la libertad para cambiarlos mediante el esfuerzo de disuadirse.
1) Al advertir las partes de tu cuerpo donde mayormente experimentas el contacto de tu ropa, se va a acelerar el proceso de aflojar tu respiración y tu musculatura.
2) Aprender a disuadirte, cuando detectas en tu mente,
Pensamientos  destructivos, sucederá tan pronto como tú te encuentres  listo.
3) Recuerda algún sentimiento no sueles experimentar con cierta frecuencia.
4) Repasa cuál es el Activador que te da ocasión para usar una determinada Base interpretativa. A ésta reconócela y dale una formulación verbal específica. GRACIAS  PEPE

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