lunes, 30 de abril de 2012


El amor es libre, que lo podamos “esperar”, “desear” es lógico; pero nunca “pretender”, “exigir”.
COMPARTIENDO en una comunidad de futuros médicos, frente al requerimiento de los profesionales y los hijos más los quehaceres propios de una familia, les pregunté a un futuro médico: ¿Cómo te las vas arreglar frente a estas necesidades?
Recibí como respuesta, que una buena ‘nana”, Pasaron los años y me la encontré en su casa de vacaciones lavando platos ¿Cómo se compagina tu pega con lavar los platos con tres niñitas?
LO AMO me respondió. Y le confíe a su esposo la respuesta. El la abrazó, la besó. Las niñitas sin saber nuestra conversación se los acercaron y los abrazaron. Desde ese día todo cambió. Ya no se queja de lavar, planchar, etc. Las tareas de la casa, por pequeñas y humildes que sean, so pueden realizar por amor, como lo hizo JESÚS, que no se avergonzó de lavar los pies a sus apóstoles para que hiciéramos otro tanto nosotros.       -
“No dejes para mañana lo debas hacer hoy”. Te lo he sugerido ya varias veces. El verdadero amor es para las 24 horas y en especial, tener 3 minutos para expresar todos los sentimientos que son las “antitoxinas” para perseverar en el arte de amar. Expresando todos los sentimientos. De lo contrario se acumula y a la primera dificultad reviento y te hiero.
Mis vacíos e insatisfacciones brotaron en mí porque no tomé en cuenta al Tercero invisible. Si no está ÉL, este amor se muere, porque el amor es el vínculo sagrado que recibí en nuestro sacramento y la máxima comunicación con las TRES DIVINAS PERSONAS.
La sicología del amor consiste en ponerse en la piel del otro, sentir lo que el otro siente, hacer propio el sufrimiento del otro, entrar en comunión con el otro.
Yo soy tú en las alegrías y en las penas, porque te quiero como eres, te amo a ti (no tus cualidades, no solo cuando te portas como a mí me gusta, no sólo cuando me haces feliz. Te amo como eres, porque decidí amarte para hacerte feliz para tu bien y el mío.
Con otras palabras la Sicología de parejas consiste en: la habilidad para crear un estado de armonía, afinidad, confianza y cooperación profunda para crecer como familia Entonces brota en plenitud el poder personal de “ser interior”, para llegar al “‘éxtasis en lo divino y humano”.
“Quien no avanza retrocede”. “Crecer o morir”, no hay término medio. El amor no admite las mentiras; o hay amor para siempre o TODO ES UNA MENTIRA.
“Juan se le declaró a Matilde y le manifestó con mil palabras que era verdadero, pero la niña lo miró profundamente y algo sabía de la historia don juanesca de él. La niña le respondió: si me amas verdaderamente me respetarás hasta que llegue al altar.

Pasaron los días y el fervor se fue apagando de parte de él. El verdadero amor no admite estancamiento, como el fuego: o devora todo el combustible o se apaga o crece. Los sufrimientos ofrecidos al otro, las insatisfacciones ofrecidas a mi pareja, bien comunicados y bien acogidos unen más, con detenimiento, a la pareja y consolidan la comunión entre ellos.”
Lo más grande que me ha tocado vivir con mi pareja es tener el coraje de pedir la gracia divina para poder perdonarla y perdonarme. Así hemos logrado ser fieles.
O mi amor es puro y desinteresado, o es un egoísmo disfrazado:
TE AMO PORQUE ME GUSTAS, ME CONVIENES, ERES UN BUEN PARTIDO Mi egoísmo es la tranca más grande que tengo. Es mi maleza. Las crisis son casi siempre choques de egoísmos.
General mente yo soy muy hábil en descubrir los egoísmos de mi mujer.., pero no me fijo, en el tremendo tronco que tengo. La gracia es amar a mi pareja también en las crisis, peleas y orar por ella.

En esos momentos difíciles. El interés desinteresado por mi pareja es amor. En cambio mi amor interesado, es egoísmo disfrazado. “Te amo porque me gustas”
(Me conviene, tiene plata).
Cuando mi novio empezó a tener desinterés por mí, se me vino el mundo abajo, me di cuenta de que su egoísmo era más fuerte que su “amor”
Me fascinan las sorpresas que mi querida esposa habitualmente me tiene todas las semanas, A ELLA LE
SALTAN LOS OJOS CUANDO LE LLEVO
ALGÚN REGA LITO.
No son las grandes cosas las que producen más amor, sino los pequeños gestos, las cosas obvias que son siempre deseadas y fortificantes. No te olvides de que cada persona es un misterio (no es ausencia de luz ni de amor, es todo lo contrario, es abundancia de todo). En el fondo, el amor no tiene límites. Nada ofende más a una persona que sentirse manipulada como un objeto, como un “robot” que debe responder a ciertos estímulos fijos.
Después de un día lleno de quehaceres y pequeñas dificultades con las dos pequeñas, al llegar su esposo, se le salió: “Esta casa es un infierno, estoy aburrida” Estas palabras lo llenaron DE PENA. No supo traducir lo que ella realmente le estaba pidiendo. Se fue a su pieza y después de un tiempo se acercó a su mujer y le dijo: Hay una buena película te invito.
Ella se volvió radiante y en dos por tres ya estaban rumbo al cine, era un  estreno.
Ella le dijo con otras palabras estoy cansada quiero salir. Ella quería sentirse amada, tomada en cuenta gratuita y libremente, tanto para cumplir.
Los mensajes deben ser llenos sentimientos de luz, paz; no de “sombras”


Nos comprometimos creyendo que con darlo todo, los secretos e incluso los pecados personales (que incumben a Dios) estábamos asegurando el amor. El pasado ya no existe y es mejor construir una realidad nueva…



Nadie puede decir “ya llegamos a la cumbre del amor, siempre se necesita más amor porque tiende al infinito”.
Más misterio, más aventura, más “sorpresa”, más ruptura de los esquemas rígidos, mitos, creencias. Para que el amor no se muera, crezca sin límites.
La ética del AMOR es eso: alimentarse de más amor, eliminando siempre los tentáculos del egoísmo asesino.
La RUTINA, la  lata, el estancamiento mata la amistad; el amor, la fe; los funden en unión eterna
 Generalmente la pareja se da cuenta, uno primero después el otro, que la relación está fallando, la amistad de la pareja esta’ “haciendo agua”,
El interés de estar juntos disminuye a ojos vista. El lo demuestra llegando cada vez más tarde a casa, siempre con menos interés en llegar; el desgano se hace evidente y se enchufa en la tele; el mensaje a todos:
 “Déjame hacer lo que yo quiera.., necesito todo el espacio.., tú me aburres y siento rechazo por ti”.
Todos nosotros producimos mensajes verbales (30%) y no verbales (70%). De luz y de sombras, que cada uno traduce a su pinta, y no siempre los traduce correctamente. Esta cultura actual se mueve más en la línea de lo “cerebral”. Hay silencios que son mensajes de amor, de perdón, de interrogación y otros que son de rechazos, desprecios, indiferencia, declaración de no existencias.
Hay miradas y miradas, unas que expresan aceptación, cariño y otras que matan, desprecian y que odian.
Mi problema no es que no haya comunicación... Sí la hay siempre, pero mala o buena. Los mensajes “tú”, son peligrosos porque en ellos aparecen con facilidad los juicios.
Los mensajes “yo”, no corren tanto peligro, porque brotan del SER. La misión de la pareja que se decidió amar siempre:
Trabajar para comunicase de SER a SER,
de corazón a corazón
Así está asegurada la excelente comunicación de sentimientos profundos. La gran pregunta de siempre: ¿Cómo me están llegando estas miradas, palabras, gestos?, te sugiero que la hagas antes de terminar el día.
No basta decir mal o bien, porque lo dicen todo y no dicen nada.
No te puedes quedar días con eso adentro. Te sugiero expresarlo con claridad, para superar esta crisis; hablar en primera persona siempre con toda tu familia”; Usando el verbo –estar-, estoy  triste, sola, aburrido, cansado, feliz,  por fin estoy en casa contigo y mi regalón

Buscaré los mensajes recibidos y trataré de:
 Interpretarlos. OJO con las indirectas! “Para que entienda” o el rechazo subliminal disfrazado de cansancio:
“Me duele la cabeza”. Para ser claros en los mensajes es indispensable conocerme a fondo a mí misma. “Soy la gran desconocida”.
Uno de los peligros de la polola es la “pretensión”, de que él me entienda sin explicaciones como yo quiero. Pasarme las  películas, videos; no cuesta nada.
Una persona tiene derecho pleno a estar cansada, molesta, irritada, pero que lo diga, y que diga el porqué, la causa; de otro modo la otra persona empieza a “su poner” que la causa de la molestia es él o ella misma e interpreta fácilmente todo como un rechazo, cuando el motivo puede ser otro ajeno a la pareja; la duda que se insinúa enseguida de un posible “desamor” provoca un clima de incertidumbre que pervierte la relación, Y si queremos salir de la duda es bueno que la persona en cuestión se dé cuenta que no es ella la mala sino la actitud la que me hiere. Una actitud se puede cambiar, la persona no. Es diferente decir: “No quiero hablar contigo en este momento” que decir: “no quiero hablar más contigo” (viene del yo cerebral y es enterrarla en la Indiferencia). El “más”, el “nunca”, “me dijeron”, “me contaron”, “supe”, ¿supiste la última?, el “siempre”, son mortales, porque exageran y absolutizan que siempre es relativo, porque las circunstancias cambian y las personas también. Es caldo de CABEZA.
Nosotros como parejas tenemos ansias infinitas de ser amadas.
La soledad nos asecha siempre. Cuando estamos en comunión de personas, nos sentimos realizadas. Y derrotamos la soledad, lo esencial de nuestras personitas es SER y sentirme persona sagrada. Es sentirme en comunión, en estar en y con la otra persona para evitar ser dominado por los tentáculos de mi yo cerebral, para comulgar ambos en  mi “Espíritu Divino que habita dentro de cada uno de nosotros”
La soledad en el amor es infidelidad a Él y una traición al “compartir profundo”, y aparece esa frase tremenda: “mi casa es un infierno”. El amor que comprometí vivir con mi pareja es más fuerte que las peleas, La amo porque yo decidí jugarme por ella en los buenos y malos momentos. No la amo porque tenga que amarla; porque el “deber” mata el verdadero amor que es libre como el mismo DIOS Amor.
Recuerdo que un Joven, con rabia me decía: “Es mi polola, me pertenece”. No había entendido nada lo que realmente significa tal palabra, amor es soberanamente libre, hace lo que hace sólo porque ama y amo porque me siento libre. El amor no se exige, ni se mendiga Todos merecemos ser amados y amar sin límites.



Para todos los que SENTIMOS a ese Padre DIOS.

Un pequeño niño me contó que sus abuelitos casados por el civil desde hacía 50 años deseaban recibir el sacramento matrimonial, Le pedí a este pequeño apóstol que me trajera a sus abuelitos  que me invitaran a su casa. Esa tarde estaban todos los nietos. Les pregunté a los  por qué deseaban recibir el sacramento. Su repuesta fue sencilla:
“Padre, hace años sentíamos  que nos faltaba la bendición de DIOS.
Mi nieto nos dijo que usted en una de sus clases les pidió que trataran de invitar a los papás a arreglar su situación y de rebote nos tocó también a nosotros”.
Yo les conté que todos estos años ya estaban casados, porque el matrimonio es un proceso. Les dije que se parte con si matrimonio natural y el civil, respetados por la iglesia, y que sólo faltaba completarlo con el sacramento.
 Les hablé sobre la espiritualidad cristiana en el matrimonio, y [ precisé que en el aspecto propiamente religioso no se debía decir “nos casamos” por “la iglesia, como se dice “por el civil”, sino que la realidad más profunda y verdadera era que los cristianos, si creían realmente en Cristo Resucitado, y en todo lo que El había enseñado, se “casan con Cristo y en Cristo”, es decir, toman en serio su palabra y su promesa de que “cuando dos se unen en mi nombre, Yo estaré en medio de ustedes” (La frase exacta dice: “Cuando dos o tres se reúnen en mi nombre”, pero el sentido más real y es si se unen en mi nombre. Invitar a Jesucristo en la propia vida matrimonial es darle importancia, es tomar en cuenta lo que Dios y pide en cada momento y esto claramente es: “Ámense el uno al otro como Yo los he amado a ustedes”, (si lo dijo para todos, “ámense unos a los otros”, seguramente lo dice con más fuerza cuando dos en su nombre quieren comprometerse a amarse.
La relación al celebrar un matrimonio religioso católico es principalmente con Jesucristo, y no tanto con los que actúan como testigos calificados (sacerdote o diácono). Ella había dicho que no le interesaban las estructuras de la Iglesia (obispos, curas, ceremonias, templos). De repente, se incorporó e interrumpió
Espontáneamente: “Si es así, ahora me decido a casarme religiosamente, ante Dios. Yo me había rehusado por que no soportaba que los curas se inmiscuyeran en nuestra vida”. Había descubierto lo esencial del aspecto religioso y cristiano del sacramento.
El matrimonio sacramental es una acción sagrada agradable a Dios, perteneciente a Dios, que transfigura y transforma el gesto profundamente humano de unión entre un varón y una mujer por amor, en un gesto divinizado, santificado, dejando la unión intacta como gesto y situación humanos. Unirse en el amor mutuo adquirirá, por intervención misteriosa sacramental de Jesucristo, el carácter y la significación de “presencia de Dios Amor” presencia actuante que al ser aceptada y vivida puede transformar la realidad ennobleciéndola y dándole un hondo sentido de trascendencia. Los esposos no se amarán sólo para este mundo que pasa, sino para siempre, para la eternidad en la que creen, por la promesa de Dios.
Es cierto que todo creyente de cualquier “denominación religiosa”, al creer en Dios y al realizar según su fe una ceremonia religiosa para su matrimonio, está proclamando una trascendencia, un algo más que “nosotros dos” -lo que sucede también a muchos no creyentes que toman en serio su compromiso matrimonial civil e intuyen cierta trascendencia- pero el misterio cristiano es más profundo pues afirma que Dios, el gran Otro, se hace presente a través del “otro”, su re presentante reconocido como “ministros”. “Lo que hagan al más pequeño de mis  hermanos me lo hacen a mí”, son palabras explícitas de Jesucristo. En esta mística o adhesión de fe, el esposo no ama solamente a su esposa como mujer  a nivel terrenal visible, sino como representante, ministro visible del Otro invisible
 (y viceversa para ella). Desde el momento en que los dos creen en este misterio, (misterio quiere decir muchísima luz y no ausencia) la fe les hace ver lo invisible, todo pasa a ser sagrado, consagrado por Dios y para Dios. Dios Amor no tiene manos para acariciar, no tiene labios para besar, ni cuerpo para expresar su deseo de unión, pero están;
Tus manos, tus labios, tu cuerpo, esposo, esposa, para hacer a Dios visible y sensible, para que te sientas amado, amada por El a través de lo que ves y sientes, lo que tocas y constatas.
 La relación sexual, plena, “valorizad ora” será una unión sacramental, un amor que se entrega sin medida, dándolo todo El lo realizó en el Sufrimiento de la Cruz, los esposos lo realizan en el gozo de la comunión amorosa, pero la entrega es la misma, a pesar de la diferencia de escenarios y de sensaciones: “todo para ti y para siempre” fue real en Jesucristo, y puede ser real en el matrimonio.
Es la interioridad lo que hace real o ficticia la entrega. No es el gesto exterior, siempre ambiguo, sino lo que cada uno es y siente después de haberse entrega do a la otra persona. Tampoco se trata de una entrega por pasión, que puede dar una sensación similar, pero jamás la misma, porque en ésta viene simplemente incluido el Amor.
Una señora que estaba presente en esta explicación intervino; “Yo sabía que los esposos somos ministros del matrimonio,
y no el sacerdote que bendice que es; “testigo autorizado” para la validez. Me pregunto si ser ministros es válido para la celebración del matrimonio y nada más”... “No, señora, es para toda la vida matrimonial, mientras quieran que perdure la relación de esposos en Cristo”.


Nos decidimos a ponernos de novios para siempre, suponiendo que teníamos una muy buena  Comunicación, 
en cambio descubrimos que sólo alcanzábamos una buena conversación de cerebro a cerebro y no de corazón a corazón.


Aprendimos el año pasado a comunicarnos de
Corazón a corazón, hoy nos sentimos felices ya que estuvimos a punto de separarnos. Antes sólo conversábamos cerebralmente, fríamente sin sentimientos, hasta nos faltamos el respeto. Este compartir de SER a SER es profundo, es comprometedor, es verdadero, expresa sentimientos que me hacen cambiar, producen desafíos, corre riesgos. Es fácil conversar, es un arte comunicarse de ser a ser,, pero este compartir siempre enriquece, cura las heridas, hace crecer el amor, la simple conversación sólo entretiene, es cerebral y nos dejaba vacio y solos.
Para nosotros la palabra compartir es muy significativa, porque es el método practico para expresar los sentimientos iluminados por la propia sabiduría interior que se expresa con amor sin romper los platos y sale el sol. Aquí aparece el verdadero amor porque regala la propia intimidad que es la máxima riqueza de la persona, su originalidad y aumenta el sistema inmunológico de la salud física y sicológica. Así tengo mejores defensas para evitar tanto mal que nos asecha.
Es más fácil detenernos en el placer y gozar y gozar. ¿Qué me queda, qué frutos da mi vida, qué
Trascendencia? El mayor peligro de los novios es la superficialidad, ofrecer al otro la cáscara del placer y guardar me para mí, por miedo, la propia riqueza interior, la intimidad personal, lo que soy por dentro. Si yo pudiera ver mi interioridad con estos ojos, no podría seguir viviendo. Mi Ser profundo es bellísimo.
Lo hizo DIOS amor.
Aquí entiendo por compartir en primera persona, involucrándome poner en común lo íntimo de mi (sentimientos profundos) yo  y lo que me hace sentir por dentro, que es siempre original, único exclusivo e irrepetible y que sólo yo mismo conozco y valorizo al máximo. Lo que sucede dentro de mí son reacciones espontáneas a cualquier cosa que me pasa, no importa si esas reacciones son causadas por algo fuera de mí (una palabra, un gesto) o dentro (un recuerdo, un pensamiento, una imaginación) la reacción espontánea a ese estímulo es lo que se produce por dentro de mí sin que yo lo quiera o no. Suceden.
Así, a estas reacciones las llamamos “sentimientos” que es la voz del alma. Lo que yo siento realmente
Es que no dependen de mi voluntad, Sacamos
entonces de esa verdad la primera conclusión: Los sentimientos, siendo en sí reacciones espontáneas no controlables, son algo natural ni bueno, ni malo (moralmente hablando); son y pueden ser, agradables, pueden expresar alegría o pena, temor o rabia, simpatía o antipatía, cercanía o rechazo (odio), ternura o asco; a todos estos yo les llamo sentimientos de luz o sentimientos de sombra (como la luz de los semáforos) así como tú yo puedo sentir hambre o frío en lo físico siento reacciones espontáneas en lo emocional.
Primera conclusión: debo reconciliarme con mis sentimientos, aceptarlos como son y reconocerlos como mensajes, avisos, que me adviertan que está pasando algo en mí, son señales de una cierta necesidad no satisfecha (pena, rabia, temor, susto, o si es satisfecha alegría).
Esta segunda conclusión señala que mis sentimientos no pueden ser desatendidos Están hechos para ser tomados en cuenta, para guiarme en mis decisiones. A estos sentimientos debemos darle salida, abrir la
Ventana, están hechos para comunicarme con los
Demás, para entenderlos mutuamente. Para crecer siempre y amar, no destruir.
Si mi sentimiento surge y si yo no lo expreso se encoge dentro de mí mismo y se vuelve resentimiento, y
Al reconcentrarse estalla de repente sin poderlo
Controlar (ataques de llanto, rabia, pánico o de hilaridad des        controlada).
Tomar en cuenta mis sentimientos no significa tomar en cuenta mis reacciones exteriores, mis “actitudes”. Los gestos, las actitudes, las palabras dependen de mi voluntad están bajo mi responsabilidad.

Porque siento “rabia” (sentimiento) no está dicho que’ tenga que gritar a todo forro, no está dicho que tenga que golpear (actitudes); pero si siento rabia, debo darme cuenta que siento rabia y acoger este sentimiento espontáneo y “encauzarlo” hacia donde quiero y decido llevarlo. El dominio de mí es válido y necesario, pero lo que “hago” no es válido ni es conveniente para lo que siento.

Al aprender a “distinguir” mis sentimientos y a
“respetarlos” como reacciones naturales no juzgables como buenas y malas, sino sólo como agradable o desagradables, favorables o “desfavorables” (tarea no fácil, porque no se enseña en la “U” ni en colegios), aprenderé a “respetar” como sagrados estos sentimientos de las otras personas, especialmente de mi pareja. Si mi pareja me dice “me dolió lo que me dijiste” no le contestaré, nunca con una disculpa y menos con una “si fue una broma’ porque la haré sufrir nuevamente; la primera porque le dolió (con razón o sin razón) “me dolió es sagrado”, y la segunda porque al darle una explicación quise justificarme, quise hacerla pasar como tonta.
Un sentimiento debe ser expresado, debe ser tomada
En cuenta y respetado; al ser acogido como es, se tranquiliza, se desahoga y me siento aliviado, porque logra la comunicación con mi pareja En cambio al darle explicaciones aunque sean verdaderas y razonables no cicatriza la herida.tqm

viernes, 27 de abril de 2012


Nos comprometimos suponiendo que en el amor hay que ser “eficientes” y “desempeñarse” como en el trabajo. Descubrimos que en la relación de novios verdaderos, el valor máximo es la “gratuidad” y que cuando se sabe perder se gana, porque el amor es una rendición que conquista.
Somos ingenieros comerciales; nuestros amigos aprobaban nuestro enlace, creíamos que todo iba a salir de perillas.., pero empezaron los problemas. La empecé a notar triste, con ojos llorosos.
“Yo la amo, la quiero, a pesar de que ella no me infla y me dice que está defraudada de mí Yo le di gusto en todo: Si le faltaba algo, yo corría; si deseaba viajar, yo la complacía; necesitaba una nana, yo se la buscaba; si se enfermaban los niños, yo me quedaba en la clínica para que ella descansara en la noche. Cerebralmente yo me felicitaba, porque a ella no le faltaba nada, igual mente a nuestros hijitos.
Ahora me di cuenta que no basta estudiar en la “U”. Ya que la Universidad no lo enseña todo, menos los colegios. Me doy cuenta que lo hago todo al revés. Ella se fue a dormir con los niños. Me rechazaba.

NUNCA TOMÉ EN CUENTA SUSENTIMIENTOPROFUNDOS.
 Ella muchas veces al lado mío lloraba y lloraba, y yo estúpidamente le preguntaba ¿pero qué te pasa? ¿Por qué lloras? (Preguntas cerebrales). Y al no tener respuesta concluía “es un problema de mujeres”, “emociones sin explicaciones lógicas” y no me preocupaba más, Ahora me doy cuenta de que “yo creía que tenía la razón”. Pero estaba equivocado, porque mi actitud era cerebral y no con amor. NO EMPATISABA CON ELLA. Y eso que yo soy Ingeniero comercial, especialista en comercio exterior, “y era el mejor en estos negocios y apliqué el mismo sistema a mi matrimonio. Ustedes pueden percibir mi gran error Nunca más,
¿Se puede tomar la familia como un simple micro- empresa? Para que resulte esta hermosa y fecunda aventura matrimonial es indispensable que se tomen muy en serio las reglas fundamentales, que deben ser conocidas y observadas, de lo contrario todo es una farsa. En las empresas se trabaja con pensamientos, ideas, debates, discusiones. En cambio aquí, en la familia, el gran motor es el SER profundo, “el corazón de donde brotan los sentimientos”, perfume del amor.
 La intuición, la sabiduría, dones, la capacidad de pedir perdón, que no tiene nada que ver con la “Ingeniería”.
En mi trabajo, profesión, negocios, yo sé que debo “rendir”, “ser eficiente”, responder a requisitos medibles. Si no sirvo me despiden. La empresa no es una asistencia pública, no me van a tener consideración porque soy yo, sino por ser “eficiente”. “Cumplo con lo que me piden”; El acento está en mi eficiencia.
Descuidar la eficiencia razonable en el HOGAR, MATRIMONIO, el acento está en la “gratitud”. “PORQUE TE QUIERO”, porque te amo y el verdadero amor es “desinteresado” Ninguna madre ama a su pequeño “porque tiene una gran esperanza que sea un gran ministro, un gran hombre y le dé un gran prestigio a ella en el futuro; lo quiere porque es carne de su carne, es su hijo de sus entrañas, lo ama gratuitamente Lo ama y el amor lo explica todo.
Te quiero simplemente por eres tú. ¿Cómo “hacer” sentir la gratuidad en el amor?; pues con algún gesto gratuito; porque sí, porque yo quiero expresar mi amor sin ningún otro motivo que “te quiero a ti por ser tú”, “por ser lo que era para mí”. Es una acción de gracias por sentirme amado y valorizado por la otra, reconociendo que es bondad, del otro “maravilla incomprensible de la persona amada”, que me sorprende con este “regalo” inmerecidamente; pero hay algo más, a mí me pasa que siento una pulsión maravillosa de entregar ese amor espiritual fuerte, que es puro. “Cuando un niñito, un joven, una viejita, vienen corriendo y me abrazan, es puro amor”. Si se insinúa la pretensión “te toca”, “deberías”, “me lo esperaba”, “tienes que”, “es tu obliga como novia”, se pierde el encanto de la gratuidad.
Esta gratuidad aparece luminosa e inconfundible “en la declaración de amor” inicial. Ninguno de los dos “pretende”. Espera, confía, desea, pero sabe que no puede “exigir”, la respuesta, Es lanzarte con todo, en el paracaídas del amor verdadero.“Dime que me amas”, es una orden. Me siento chantajeado.
Hoy, los “LOLOS” se sienten libres de andar, tirar, pololean, se van a vivir juntos y después hacen los trámites para casarse. Muchas están curadas de es panto por las mentiras que han descubierto.
Un día cuando llegué a casa, iba con mucho susto, esperando una buena y merecida retada. Con mi esposo teníamos una comunidad de gastos. Nos comprometimos a no hacer ningún gasto sin estar de acuerdo los dos... Pero yo, a sabiendas, me comprometí en gastos y giré cheques. Era un pequeño mueble lindo para el baño,.. Pero la retada no llegó, me miró y me dijo es lindo el mueble... de hecho lo necesitábamos. Pero me habría gustado haberlo conversado y te habría acompañado.
ME SEN TI AMADA, ALIVIO AL CORAZON, sentí COMPRENSIÓN, Te sentí cerca.
Es un típico gesto gratuito, tanto más si se lo cuenta y es grato, cuanto menos esperado y “merecido”. Nadie puede merecer el amor, sólo se puede “sentir gozo, alegría”, sólo quien sabe agradecer sabe amar, porque sabe reconocer la belleza de la gratuidad. El amor verdadero no se mendiga, lo merezco. En cambio, le permito ganar la verdadera “guerra”: “el amor incondicional de su esposa”. “El amor es una rendición que conquista”. “En e! amor se gana perdiendo”, haciendo ganar a! otro ganan siempre los dos.GF.


No pusimos de novios suponiendo que estábamos hechos el uno para el otro, aunque éramos tan distintos que parecía que veníamos de planetas diferentes
Ambos, mi pareja y yo, somos PERSONAS, iguales en dignidad, ni más, ni menos, Fuimos creados con la tremenda capacidad de relacionarnos y con una pro funda sed de ser felices. Tenemos las mismas limitacio- nes y tendencias degenerativas aunque no se expresan de la misma manera en uno y otro.
El ser humano completo, capaz de ser fecundo, es varón y mujer: un so ser en el Amor, los dos para ser una pareja. Sólo en la unión son plenamente o que son cada uno. La mujer verdaderamente femenina estimula al varón a ser varón, distinto de ella, pero para ella. El varón verdaderamente viril estimula a la mujer a ser lo que es: mujer plena distinta de él, pero para él. Son el uno para el otro. “No es bueno que el hombre (ser humano completo) esté solo. Hagámosle una compa ñera (no esclava), semejante a EL’ La persona hombre y la persona mujer han nacido en primera instancia para amar y recibir amor, que es la necesidad sicológica vital más importante. Al “encontrarse” el uno al otro, cada uno descubre su propia “limitación”, su soledad y aquí se despierta naturalmente el amor, el descubrimiento de que cada uno está hecho para el otro, para estar juntos “ser más, crecer juntos”.
Aquí brota la felicidad, el gozo de sentirse plenos, realizados y constata cada uno que sin el otro no es plenamente uno, en este sentido hablamos de complementariedad. En este sentido decimos que la mujer llega a ser mujer bajo la mirada profunda del varón y viceversa, el varón llega a ser varón bajo la mirada profunda de ella La humanización es recíproca. Para realizar esta unificación, además de amar, es in dispensable ser útiles para el otro y para la sociedad, y trascender en su capacidad de relacionarse, sus valores, sus dones, sus cualidades artísticas, sus intuiciones, su intimidad: ésta es la raíz del amor, de la capacidad congénita de amar, de descubrir que cada uno es una sola cosa con el otro, una mismidad para el otro. En cada encuentro brota espontáneo e irreprimible un mensaje de aceptación o rechazo, incluso cuando está matizado de cierta indiferencia. “Yo no soy ni mueble ni fetiche sexual de nadie”...
Para este encuentro cara a cara, de ser a ser, de corazón a corazón, para poder asumirnos realmente,
- es indispensables compartir nuestros sentimientos de luz y de sombra, que nos vitalizan, nos hace ser más para el otro, sin dejar de ser originales. El ser mujer y ser hombre, nos mantiene originales aunque siempre con Fa mirada del otro, es decir para el otro, para una buena comunión para ambos. La pareja que no toma en cuenta esta originalidad, la unión con el otro y para el otro, es egocéntrica y mata el amor.
“Nosotros como pareja estamos participando activamente de esa tremenda decisión de amarnos en las buenas y en las malas, en salud y enfermedad, en la pobreza y abundancia. Muchas veces estuvimos sin hablarnos ni mirarnos durante meses, esta relación ya no daba más... pero no nos separamos por esta hermosa decisión.
“Nos dimos cuenta que amar es mucho más que esforzarse para “pasarlo bien juntos’ En el nido era todo maravilloso, pero durante el día nos pasábamos peleando. Amar es jugarse por la plenitud del otro, hacerse corresponsales del desarrollo vocacional de la otra persona, (la primera responsabilidad mía es ser yo mismo, sin vicios ni dependencias, ser buen acompañante del camino original personal de ella, no sólo en lo profesional, maternidad, paternidad, sino en la trascendencia).
“Ni yo ni mi pareja somos esclavos de nadie Re conozco que yo he atropellado mil veces a mi pa reja, por esto le pido perdón”.
En esta “familia de fe” de este siglo nadie es más que nadie, ni menos que nadie.
¿ Me llevaste el traje a la lavandería?
No soy tu empleada...
Por supuesto, si fueras empleada al menos sabrías hacer bien el aseo…
“Una de las máscaras que yo tengo es mi orgullo:
No acepto “pelos en lomo”, por eso nos llevamos peleando. Lo peor es que por eso llega tarde y yo lo espero con todas las furias que tengo. Estamos mal”.
La idea es lograr nuestra sexualidad trascendente, que es hermosa. La sexualidad no es solamente genital, es mucho más que eso, Es trascendental, creativa, es el poder personal de la pareja, es la capacidad que tiene de ser cocreadores en todo el sentido profundo de la palabra (arte, música, poesía, desarrollo cultural digno, hijos, vida). Esta sexualidad no es un instinto, sino una capacidad al servicio del amor, de la vida, es una pulsión (“TRIEB” como lo llama Freud).
Para unirme a mi pareja necesito desnudarme sicológica y físicamente. Para unirnos, descubrimos la transparencia de los sentimientos, lo que es cada uno por dentro, no sólo por fuera. No es mi sexualidad la que me hace inventar el amor.
Es el amor, lo que nos revela lo que podría ser la sexualidad plena de Amor y una sexualidad trascendente la que da sentido.
El vocablo “agua” no moja a nadie. La palabra “amor” tampoco hace feliz a nadie, Si la palabra “sexualidad” no lleva; ni comunica lo que debe contener (amor profundo) pasa a ser la gran mentira, un espantoso engaño. ¿Cuántas lágrimas de soledad, penas después de un abrazo efímero entre las olas de una ternura, llenos de espumas vacías?-Place: comparte con tu pareja. TQM.PEPE

jueves, 26 de abril de 2012


Nos comprometimos  suponiendo
Que para amar bastaba
“darnos gustos” y en cambio descubrimos que muchas veces
Nos favorecimos “con malos gustos” que eclipsaron nuestra relación-A-


Aquí el uso de tos sentimientos es de primera importancia, si no los uso, las consecuencias son desastrosas. “Yo vi un video pomo con ella y des pues quise experimentarlo. Me da vergüenza recordarlo. Me sentí sucio, cómplice de esa prostitución de ambos. Por darnos esos tipos de gustos tuvimos dos semanas muy tristes, impuros y sin ganas de nada
Estoy enamorado, todo me parece fácil. Darte gusto a mi pareja, complacerla en todo, es placentero y al comienzo parece maravilloso. Pero unas pequeñas desviaciones, insignificantes al principio, se me volvieron incontrolables y desastrosas a lo largo de nuestro pololeo. Es normal complacer a mi pareja, darle en el gusto y disfrutar con ello, es signo de amor verdadero siempre que todos esos gestos nos hagan crecer como personas, que me acerque al autor del Amor, a mi familia y amigos. Cuando sucede lo contrario] LUZ ROJA. Es óptimo buscar el bien del otro, dar importancia a mi pareja, pero si favorezco el egoísmo en perversidades nos estamos autodestruyendo. Las malezas, al principio camufladas de amor, lentamente crecen y me invaden, se apoderan de todo el espacio y sofocan la libertad de mi pareja, que empieza a sentirse víctima explotada; el amor se enfría, el entusiasmo de amar desaparece y empieza la resignación o francamente la rebeldía Es demasiado tarde para reaccionar; el amor se murió. “Siembra vientos y cosecharás tempestades”. Nadie es perfecto, nadie se compromete con una persona libre de defectos y de rabias incontrolables. Aceptar esto como una situación normal no significa aprobar esas actitudes ni soportarlas. Aceptar esta realidad con buen criterio significa para mí, aceptar el desafío de la vida para rectificar las conductas erróneas, algunas conscientes y otras inconscientes o involuntarias, que son fruto de mi genética y de mi falta de experiencia. Todos estamos inclinados al bien, pero somos débiles. Chile es testigo de invitaciones totalmente inmorales, que profanan las caricias sanas previas a a relación. Me da vergüenza ajena cómo algunos medios de comunicación están corrompiendo a nuestra querida juventud y parejas.
Mi amor sin exigencias, nos empobrece.
Tus exigencias sin amor me enfurecen.
Sólo tu amor gratuito y exigente me engrandece.
Cuando me perdonas, tu amor se diviniza.
Nosotros como pareja estamos haciendo nuestro  proyecto de vida. Con cariño se los presentamos:
NUESTRO PROYECTO DE VDA EN PAREJA
Somos JAIME Y SANDRA;
: Lo primero fue saber lo que queríamos.
S: Apenas vi a Jaime me dije: ESTE es mi hombre, el compañero de vida que mi Padre Dios me tenía reservado”.
J: Cuando te vi, Sandrita, lo primero que sentí fue una inmensa paz y acogida. Conocerte, me hizo renacer a la vida, a la esperanza y al amor.
5: Lo segundo, nos lleva a estar bien despiertos y atentos en todo momento para oír al Señor; hacer su voluntad y dar como pareja testimonio del clamoroso amor que Él tiene para con nosotros.
J: Vivirnos en una docilidad, humildad y flexibili- dad para perdonamos, crecer el amor, Cam- biar y superar nuestras limitaciones para llegar a ser más libres.
5: Lo tercero, que nuestro hogar esté sustentado por la presencia tiernamente del Dios Amor, por la calidez, la acogida y la apertura a los hijos que puedan venir a nuestro nido.
J: Que nuestra vida en común esté iluminada por nuestra devoción del uno por el otro, gratuita y generosa, buscando siempre el bien del otro y apoyarlo en su crecimiento espiritual y personal.
Este es texto de nuestra “ALIANZA”, que
También te regalamos.
J: YO, Jaime, porque te amo, Sandra, te pido que seas mi esposa cristiana. En este momento tan hermoso, me consagro a Dios Amor en tu persona y en la de nuestros hijos.
Sandra, ¿me aceptas libremente tal como soy en los buenos y malos momentos, en la salud y enfermedad, como tu legítimo esposo cristia- no?
S: Sí, mi amor, Yo, Sandra Isabel, porque te amo profundamente me consagro al Dios Amor, en tu persona y en la de nuestros hijos; en los buenos y malos momentos, en la salud yenfermedades.
¿Me aceptas tal como soy hasta que la muerte nos separe?
J: Si te acepto con todo lo que soy
Mi verdadero amor aspira a que la persona crezca, mejore, sea más plena. Me preocupo de lograrlo cariñosamente con tono, tino, tacto, ternura, Al no tener ideales claros, proyectos de vida personal, nuestro pololeo se va haciendo rutinario y nos conformamos creyendo que todo va a mejorar si hay amor. La experiencia enseña, en cambio, que los malos hábitos se refuerzan con el tiempo, los troncos de los árboles están torcidos. Enfrentar la corrección de un detecto de mi pareja es delicado, sobre todo si se trata de una adicción al alcohol o a las drogas, que son amantes que destruyen nuestro amor. El amor sin exigencia empobrece, no nos estimula a crecer. Quien ama de verdad quiere y busca el bien de la pareja y desea que el ser amado sea el mejor en todo lo que hace (profesión) y en lo que “ES” como persona. —


Sobre el éxtasis espiritual


Es plenitud permanente y muy intensa.
Es salir de la rutina sin caer en bajezas.
Es dejar salir de mi egoísmo
a mi Ser profundo y hermoso.
Es llegar a Dios.
Es una profunda experiencia espiritual.
(Un novio feliz)
Nadie ha visto a Dios Amor, pero si nos amamos llegaremos al éxtasis: el éxtasis del amor que dura las 24 horas del día.
¿En qué consiste el éxtasis de una pareja sana? Consiste en todo lo sublime que se vive en una pareja madura en el amor, La relación sexual plena es algo singularmente misteriosa, armónica y sin bajezas. El éxtasis la transforma en un exquisito compartir durante todo el día, que se vive de distinta forma por distintos tipos de personas, pero donde siempre se mezcla in tensamente lo humano con lo divino, Es tan hermosa la comunicación profunda antes y después de una relación sexual pura, que permite manifestar y recibir ternura y delicadeza, al mismo tiempo que vivimos sabiéndonos elegidos el uno para el otro, por Dios Amor, para ser felices en plenitud. La disponibilidad que demuestro para mi pareja, que es lo más importante para m va dando lugar a ese “compartir profundo, con silencios, gestos, miradas y palabras que se transforman en una oración de agradecimiento porque sé que también me ama y elige”. El éxtasis se convierte en una especie de bálsamo curativo, es hacer el amor todo el día con detalles, como despertar a mi pareja con un desayuno, prepararle una tina espumante tibia, llamarla por teléfo no a su trabajo, ir a verla a su oficina. Ser una esponja cuando me cuenta las grandes o pequeñas dificultades del día, sin interrumpir. Recibirla con un rico plato de tallarines, perfumada la casa y con mil gestos de cariño a quien me acompaña en la vida.
Nuestras individualidades se transforman en “un solo ser’ (como dice la Biblia) que se dona por amor y que luego continúa esforzándose para enriquecer a la pareja, en un compartir de sentimientos profundos, llenos de ternura, Qué maravilla más grande resulta el tiempo de compartir antes, durante y después de la relación sexual. Hay riquezas inexploradas y descubrimientos maravillosos que a medida que transcurre el tiempo se llenan de más intimidad y ansiedad por conocer más del otro. El amor tiende al infinito. Nos permite llegar a niveles insospechados de confianza y ganas de desarrollarnos, de hacernos crecer mutuamente, Al estar dispuestos a entregar lo más valioso de nosotros sin pedir nada a cambio, estamos alimentando nuestra ansia de infinito. Si ustedes se aman como pareja en esta forma, van a trasuntar al DIOS INVISIBLE, “El estará entre ustedes y Su Amor dará sus frutos en ustedes y en sus hijos” (ver 1 Juan 4, 12). No somos las cosas que hacemos, o nuestro dinero o posesiones materiaes, somos las personas que nos damos y recibimos con alegría, con amor, responsabilidad y placer genero so. Nos disfrutamos al comprobar que antes de elegir- nos nosotros, El ya nos tenía elegidos (ver Génesis 2, 24-25 y Juan 15, 16-17). Esta alegría es comunicativa, nos sentimos plenos porque somos valorizados en todo nuestro ser profundo, pero es un resultado que no se improvisa, que no es casual, que no es fruto automático de un encuentro pasional, sino de un lento camino de conocimiento mutuo, de una fe sólida en creer todo lo que el otro dice sentir hacia mí. Es una confianza absoluta en la sinceridad y autenticidad del otro. Se acaban las mentiras, falsedad y engaños; mi confianza pide una entrega sin garantía, plena de gozo, gratuita, porque sí, porque le amo” y porque te amo, te creo, y porque te oreo, me fío, y porque me fío, me entrego, y tú puedes hacer de mí lo que quieras. Si nos amamos de ser a ser (de corazón a corazón), Dios Amor está presente realmente entre nosotros, lo sentimos, lo vivimos. Esto implica no dejarme estar, cada día me capa cito en todas las ciencias, artes, poesía. Esto es el éxtasis Espiritual
Para compartir:
• ¿Cuál es el plan de Dios Padre frente al éxtasis?
¿Cuál es el éxtasis de los santos? Explica.
• ¿Se puede lograr el éxtasis espiritual después de una hermosa relación sexual, completa lenta?
Nosotras somos como la montaña rusa
En sus relaciones, las lotas se alejan para luego volver; ellas suben y bajan en su capacidad para amarse y amar a los demás. Al bajar su autoestima, la lola se siente sola y vacía, por lo tanto, necesita que la llenen de amor. Este es un ciclo constante que desconcierta al hombre, pues espera que la mujer sea fuente de placer, alegría y cariño, como cuando empezaron a amarse; si la mujer se siente infeliz, su pareja no sabe qué hacer y su reacción es enojarse, “arreglaría” como si fuese un artefacto, o dejarla sola “hasta que se le pase”.
Es entonces cuando ella necesita más que nunca a su pareja, pero de una forma muy especial; acompañarla mientras está triste, escuchar sus sentimientos, solida rizar con ellos sin enfadarse ni sentirse frustrado, ni tampoco ofrecerle soluciones, sólo escuchar de verdad evitando el impulso de influir en ella desde la perspectiva racional masculina. Sólo con su amor, atención y apoyo, el varón ya estará haciendo por ella algo que equivale al mejor regalo.
Para conversar
¿Sabemos estar juntos y felices en las subidas y baladas de la montaña rusa? TQM PEPE.


MI SEXALIDAD HERMOSA ESTA ALSERVICIO DE MI AMOR DIVINISADO QUE ME ACERCA A ÉL

Aunque la mujer pueda excitarse sexualmente, nunca llega a comprender a intensidad irresistible del orgasmo masculino Ella se asusta de las reacciones de su compañero, que muchas veces llegan a ser brutales y hasta a desembocar en a violencia, incomprensible y monstruosa para ella, Eso no es la trascenden- cia de la que hablamos. Culturalmente el hombre hace separación entre el acto genital y el amor La mujer en esto es más ética que el varón, y por eso mismo no hace tal distinción. A ella le resulta monstruoso incluso imaginar pagar dinero para obtener placer carnal, engañar o violar para satisfacer una pasión incontrolada.
Una joven amiga me contaba un día que en la micro es muy común que los hombres manoseen a las lolas o que se pongan en posiciones estratégicas para tener un contacto físico determinado y también ellas lo hacen. Le pregunté si se le ocurría una manera de evitarlo… y me respondió: “Pepe, me he dado cuenta de que afearse no resulta. Esto le  pasa a todas las mujeres... especialmente a las más atractivas. Yo soy muy recatada, tú sabes, no uso ropa provocativa ni maquillaje... pero es lo mismo. Son los hombres los que no respetan”.
La mujer ingenuamente desconoce esta realidad y expone sus atributos sexuales sin tomar en cuenta que despierta pulsiones fortísimas tanto en varones capaces de controlarse como en otros que no han sido educados en el dominio de sí mismos.
En el matrimonio, la relación sexual es trascendente. Todo “debería” realizarse armoniosamente, para felicidad de ambos, pero no siempre la relación funciona a satisfacción mutua. La sexualidad es un lenguaje y puede expresar tanto sentimientos nobles y  vitalizan tés (amor, ternura, valoración del otro), como lo contrario: la manipulación, el uso, la posesión y la instrumentalización del otro, que puede expresar el egoísmo más brutal.
El punto crítico está en que la sexualidad se puede centrar sólo en el placer o en el amor puro.
El placer, don extraordinario de la naturaleza, es intransferible, “incomunicable”, personal y exclusivo de cada persona. El placer, el orgasmo, no vence la soledad. Cada individuo logrará, si lo logra, su propio placer, pero no puede hacer sentir al otro su propio placer. La sensación de gusto que experimento al comer una fruta es intransferible. La otra persona podrá comer un pedazo de la misma fruta, y sentir su propio gusto, pero nunca el mío. Quienes piensan que basta con que ambos cónyuges logren el placer sexual al mismo tiempo, se desilusionan al ver que así no se logra la plenitud en el amor Si no llega al éxtasis, el proceso está inconcluso.
Muchas señoras se quejan de que después de la “hermosa relación”, él se queda dormido mientras a ella no le queda otra cosa que ponerse a tejer, ver tele o jugar “solitario”. Solo logran una satisfacción física, y las personas no se comunican de SER a SER como seres que se aman y se valorizan y que regalan lo que son”, no una parte, no sólo su genitalidad.
El varón que frecuenta prostitutas logrará placer, pero nunca alegría de vivir, y saldrá de la experiencia sexual sin amor, más triste y más solo.
Hace algún tiempo, atendí a un amigo de unos 75 años que partía de este mundo. Tenía en su casa una gran cantidad de trofeos, medallas, copas y galvanos por reconocimiento de sus dones altruistas, Le pregunté entonces: “ qué estás orgulloso en estos 75 años? Y él me respondió:
“De haberle sido fiel a mi mujer”. PLOP: Pensé yo, y volví a preguntarle: “ Y con las veinte mujeres con que anduviste?”. “Eso no fue amor’ me contestó, “fue solo pasión’
La cumbre de la auténtica sexualidad humana es la valoración plena de mi pareja, sentir y hacer sentir cuánto valemos; hacerle sentir a mi pareja que se me rece la plena donación de todo mi ser: “Yo quiero ser una sola cosa contigo, porque eres buena, y mereces mi ser completo”. Esta plenitud es la comunión de dos personas y se manifiesta naturalmente en el amor, pero es mucho más trascendental que el placer físico y hace sentir la “alegría”, el “gozo” de ser lo que uno es y de ser para el otro, y el otro para uno, en una “unidad” que supera toda imaginación y que sólo los que logran amarse de verdad experimentan. Aquí se hace presen te de una forma inimaginable el TERCERO INVISIBLE, que es el único que no molesta en una relación de pareja, porque nos da la certeza plena de que el otro es bueno simplemente porque es persona.
“Para llegar a una confianza total con mi pareja necesité conocerla plenamente, haberla tratado con amor y tener la certeza de que también me ama, me conoce y sabe que valgo mucho para ella. Este proceso ya lleva 15 años de matrimonio y nos amamos cada vez más. Me ha servido mucho lo que nos pidió el sacerdote que nos preparó:
“Les pido, por el amor de ustedes y el de sus hijos, que nunca se duerman enojados”. Hace tan tos años que hemos cumplido este maravilloso propósito, que ya lo hicimos nuestro.
Muchas veces en nuestra relación me enojé por tonteras. Al llegar la noche yo, muy patudamente, pretendía darla vuelta y hasta la chantajeaba, pero ella no me creía. Así no me quedaba otra que tomar la decisión de aprender a comunicarnos con los sentimientos en primera persona o renunciar a este sueño de amarnos hasta la eternidad.
Preguntas profundas     
• Al iniciar la relación de pareja sentíamos los mismos gustos, ¿por qué hoy ya no sentimos lo mismo si somos las mismas personas?
• El ser persona hombre o persona mujer nos lleva a descubrir y sentir en forma distinta la relación sexual. ¿Como la vemos cada uno?
_ ¿En qué me doy cuenta cuando mi sexualidad es solo genital y cuando es trascendente?